La clave de comunicar un producto o servicio que funciona es su ajuste con las necesidades de las personas que lo van a usar.
Es necesario conocer cuáles son esas necesidades (unas veces presentes y otras latentes), cómo se usan las soluciones existentes, qué se demanda que no exista en el mercado o quién está realizando las mejores soluciones.
En definitiva, comprender qué esperan las personas de las organizaciones y en qué momentos la relación se hace crítica. Los procesos de comprensión o generación de insights, se llevan a cabo mediante la aplicación de técnicas de investigación como los tests de usabilidad, la etnografía, el benchmarking o la cocreación.